TEATRO:
UNA HISTORIA ORIGINAL
Había
una vez…
-
¿Qué pasa con las historias que no
se cuentan
¿A dónde
van? ¿En qué se transforman?
- …En dolor.
Él quiere contar historias y su pasión lo hace
intentarlo una y otra vez, sin saber a ciencia cierta cuándo será su
momento. Ella, ha apagado su voz desde hace un tiempo, la
rutina es el radar que la mueve y las decisiones en su mente no llegan a
ponerse de acuerdo. Ellos, allá atrás, al fondo del escenario, son los
otros dos protagonistas de esta historia. Cuatro, ni uno más, ni uno menos.
Había que buscar una historia original, que llegue,
que pegue, que encante, que jale. ¿Y qué
tan originales pueden ser esas narraciones?
Tal vez cada uno tenga su propia leyenda y esta resulte “original” para
otros... Sentada en la butaca de la fila
número 6 observaba, un tanto inquieta, una historia que me resultaba demasiado
conocida. Destapaba unos cuantos
recuerdos y me sorprendía con la similitud y la objetividad de eso que dice “cualquier
parecido con la realidad es pura coincidencia”…Puede que sí. Puede que no.
“Una Historia Original” es la obra escrita y
dirigida por Vanessa Vizcarra Soberón,
ganadora del 5to. Concurso de Dramaturgia Peruana en el 2014 “Ponemos tu
obra en escena”. La creadora de una
conmovedora narración que encierra en poco más de sesenta minutos sentimientos
y acciones que seguramente le ocurren a muchos, en distintos lugares. Una combinación exitosa del amor real por la
familia, las parejas y por tu vocación.
César Ritter hace una interpretación tierna del
personaje que lo acoge, el lado más puro
de este contexto. Katerina D’onofrio ¡espectacular! El lado y la voz conmovedora para este
relato, dulce pero insegura de sus propios alcances, la mujer que a veces se
sabotea a sí misma siendo probablemente un éxito, apasionada con sus propósitos
y sin saber bien qué hacer o decir tantas veces, con una oportunidad inmensa entre
sus manos y una responsabilidad conmovedora que la ata y le corta las
alas. Lita Baluarte es como la mariposa
de la obra, llena de vida, su sola presencia remueve el escenario, guapísima,
pícara y por momentos rebelde, sobre ella recae el peso de una realidad que a
gritos nos rodea, escoger un mal amor y las consecuencias nefastas de no cerrar
una relación tóxica A TIEMPO. Franklin Dávalos,
tan ecuánime como maligno, enfocado por completo en su interpretación es
el rostro del primer encuentro, del deseo y también del sello en la tumba en su
personaje principal durante la obra pues también interpreta a otros secundarios.
No sé a ciencia cierta qué me causó más impacto,
si ver al personaje central entusiasmado por un sueño alcanzado a través de una
maestría allá, muy lejos; si sentir desde el escenario las dudas que tantas
veces tenemos y no saber qué elegir porque hay amores muy fuertes que nos atan “aquí”
y esperamos demasiado de alguien. O si
fue la crudeza de la escena en que golpean a su hermana hasta dejarla vegetal y
así darle un nuevo giro a la historia.
¿Qué pasará? ¿Qué dirá? ¿Qué decidirá? Irte o quedarte. Cerrar la página y continuar o dejar que una
historia triste no tenga fin.
EL minimalismo a la luz de distintas definiciones:
un escenario casi vacío dirigido tan solo por un juego de luces por momentos
multicolor y otros tantos imperceptible.
Sonidos básicos acaso de música rítmica que te entretiene y te hace
sonreír y en ocasiones te pone los pelos de punta, o un arma haciendo explosión
y silenciando por completo el teatro. El
vestuario totalmente básico, adaptándose invariablemente a las distintas
escenas. Y los cuatro personajes porque no
se ha necesitado ni uno más. Ellos han
valido por un batallón de integrantes,
han hecho lo que tal vez cien no hubieran logrado…Conmover a las visitas
de esa noche: nosotros.
Una historia tiene que estar muy bien
estructurada para que logre insertarte en su propia realidad. Si el artista logra conmoverte, meterte de
lleno, impactarte de cualquier forma,
transportarte a un momento y lugar propio en tu interior, si te hace pensar, si obtiene una
interpretación desde tu propio punto de vista, entonces lo ha logrado.
Muy bien narrada, con un guión que te involucra
desde el principio, con algo que contar
a través de la ejecución precisa y conmovedora de los actores, un minimalismo que se suma a la crudeza de
algunas escenas, esas que literalmente golpean tu mente y te devuelven un
sentido de la realidad que a veces no quisiera que existiese. Amor filial, amor carnal, amor profesional, sueños, metas, dudas, amor
bonito y también desamor. Tal vez la
receta perfecta para esta original forma de contar una cotidiana verdad.
Quedan pocos días, no dejen de ir al Teatro
Británico. Como me dijeron cuando me la
recomendaron es “¡buenaza!!! “ Y sí, es realmente buena. 100% recomendada.
Lucy
No hay comentarios:
Publicar un comentario